El ombligo de un recién nacido puede sangrar mientras que el cordón está en desarrollo de desplomarse. Muy de forma frecuente, el sangrado del ombligo del recién nacido no es fundamento de preocupación, sino más bien una sección habitual del desarrollo de curación. Esporádicamente, no obstante, puede señalar un inconveniente, con lo que es aconsejable una visita al médico.
El cordón umbilical provee nutrientes de la madre al feto. Cuando nace el bebé, ahora no requiere el cordón umbilical para otorgar estos nutrientes, con lo que los médicos cortan el cordón. Por último, el cordón se seca y se cae, dejando un ombligo en su rincón.
¿Por qué razón fundamentos puede sangrar el ombligo de un recién nacido?
En la mayor parte de las situaciones, el sangrado es totalmente natural. Varios progenitores y mamás tienen la posibilidad de ver una pequeña área de sangrado en el punto donde el cordón umbilical del recién nacido empieza a separarse del cuerpo.
En ocasiones, exactamente el mismo pañal del bebé o aun una prenda tienen la posibilidad de rozar el cordón umbilical. Esto puede irritar la región y ocasionar un suave sangrado asimismo.
De qué manera proteger el muñón del cordón umbilical
Para parar el sangrado del ombligo de un bebé recién nacido, sosten una gasa limpia de forma despacio pero estable sobre el área del ombligo. Un médico va a deber valorar cualquier sangrado que no se detenga con una presión despacio.
Proteger el muñón del cordón umbilical apropiadamente puede contribuir a impedir o achicar el sangrado del ombligo. Puedes cuidar al muñón del cordón umbilical siguiendo los próximos consejos:
- Mantén la región seca. Sostener el muñón del cordón umbilical seco va a ayudar a que el cordón sobrante se seque y se caiga. Lo más esencial es sostener el cordón LIMPIO Y SECO, no precisa de ninguna solución desinfectante ni aséptica.
- Para bañarlo, puedes sumergir el muñón en la bañera o duchar al bebé por partes sobre el cambiador. Ninguna de las maneras de llevarlo a cabo demostró mucho más virtudes la una sobre la otra. Con independencia de de qué forma lo hagamos, esto no influirá ni en un mayor peligro de infección, ni de sangrado, ni de mayor retardo en la caída determinante. Hacedlo como les sintáis mucho más seguros.
- Mostrar el área al aire. Dejar el muñón descubierto en el transcurso de un rato de tiempo cada día puede asistirlo a secarse. Aun si eludimos que el pañal lo cubra, ¡mejor que mejor!
- Cambia el pañal del bebé de forma regular. Un pañal limpio y seco impide que la orina o las heces lleguen al área umbilical y contribuye a impedir probables infecciones.
- Deja que el cordón se caiga por sí mismo. Tirar del muñón o intentar quitarlo antes que esté listo para desplomarse puede ocasionar mal, sangrado e inclusive una infección.
Es muy normal que tras la caída del cordón el ombligo prosiga sangrando unos días de forma puntual y en pequeña cuantía. ¡No les preocupéis! Dejad que se seque la pequeña costra que se forma en el ombligo y no procuréis retirarla. Se va a caer sola en unos días.
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