La etapa de dejar el pañal es un hito importante en el proceso de desarrollo de nuestros hijos. Para muchos padres, puede ser un momento de incertidumbre y dudas sobre cuál es la mejor forma de abordar este proceso. El enfoque Montessori nos ofrece una opción respetuosa y basada en el desarrollo natural del niño. A continuación, te presentamos los 8 pasos para dejar el pañal siguiendo este enfoque:
Paso 1 – Cámbiale el pañal en el baño siempre
El primer paso para dejar el pañal según el enfoque Montessori es cambiar el pañal en el baño siempre. Esto significa llevar al niño al baño para cambiarle el pañal en lugar de hacerlo en otra habitación. Al realizar este cambio en el baño, estamos estableciendo una asociación en la mente del niño entre el baño y el acto de eliminar residuos corporales.
Paso 2 – Cámbiale el pañal de pie
En lugar de cambiar el pañal acostado, es recomendable cambiarlo de pie. ¿Por qué? Porque al cambiar el pañal de pie, el niño experimenta la sensación de estar de pie, lo cual es una posición más natural para la eliminación. Además, esto ayuda a que el niño asocie la eliminación de residuos con estar de pie, lo cual es un paso importante hacia el control de esfínteres.
Paso 3 – Permite que el niño te observe en el baño
Es importante que normalicemos el proceso de eliminación urinaria y fecal para el niño. Una forma de hacerlo es permitiendo que el niño te observe en el baño. De esta manera, el niño puede aprender a partir de la observación y comenzar a entender cómo funcionan los procesos corporales.
Paso 4 – Utiliza el lenguaje apropiado
El lenguaje que utilizamos al referirnos a la eliminación puede tener un impacto en la percepción del niño sobre esta función corporal. Es importante utilizar palabras positivas y descriptivas para normalizar el proceso. Por ejemplo, en lugar de decir «hacer caca» o «hacer pis», podemos decir «eliminar» o «ir al baño». Esto ayuda a que el niño entienda que la eliminación es algo natural y saludable.
Paso 5 – Establece un horario de pañales
Para ayudar al niño a anticipar la necesidad de ir al baño, es recomendable establecer un horario regular para cambiar los pañales. Esto ayuda a crear una rutina y facilita que el niño reconozca cuándo es el momento de ir al baño. Por supuesto, es importante ser flexible y respetar las necesidades del niño, pero tener un horario puede ser de gran ayuda.
Paso 6 – Introduce el orinal o adaptador para el váter
A medida que el niño vaya progresando en el proceso, es recomendable introducir un orinal o adaptador para el váter. Esto puede ser un paso intermedio hacia la eliminación completa del pañal. Ofrecer opciones y permitir que el niño decida cuál prefiere utilizar es importante para fomentar su autonomía y sentido de control.
Paso 7 – Anima al niño a participar en el proceso de cambio de pañal
Empoderar al niño en el proceso de dejar el pañal es fundamental. Una forma de hacerlo es involucrar al niño en el cambio de pañal. Podemos permitirle que participe de forma activa, por ejemplo, dándole papel para que se limpie o dejándole tirar el pañal sucio en el cubo de basura. Esto ayuda a que el niño se sienta parte activa de su propio proceso.
Paso 8 – Celebra los logros y muestra paciencia
Es importante celebrar los logros del niño en el proceso de dejar el pañal. Reconocer y elogiar sus avances es fundamental para motivarlo y reforzar su autoestima. Al mismo tiempo, es necesario mostrar paciencia y comprensión ante posibles retrocesos o dificultades que el niño pueda experimentar. El proceso de dejar el pañal puede ser diferente para cada niño, y es importante adaptarse a las necesidades individuales.
Conclusiones
Seguir el enfoque Montessori en el proceso de dejar el pañal implica cambiar el pañal en el baño siempre, cambiarlo de pie, permitir que el niño te observe en el baño, utilizar un lenguaje apropiado, establecer un horario de pañales, introducir el orinal o adaptador para el váter, animar al niño a participar activamente y celebrar sus logros con paciencia. Es importante recordar que cada niño tiene su propio ritmo y que este proceso requiere tiempo y paciencia. ¡Ánimo a todos los padres que están atravesando esta etapa con sus hijos!
